La mejor opción para aves, carnes rojas y endibias. Se puede consumir fría o caliente.
Ingredientes
Apio: 1 tallo
Queso roquefort: 250 g
Leche: 100 g
Crema de leche: 200 cm3
Sal y pimienta a gusto
Retirar los hilos del tallo de apio con un pelapapas.
Picarlo y reservarlo.
Cortar el queso roquefort y colocarlo en una cacerola.
Agregar la leche y la crema. Mezclar bien.
Cocinar la preparación a fuego suave, mezclando cada tanto para que no se adhiera a la cacerola. Incorporar el apio picado
y seguir cocinando hasta obtener una crema espesa. Salpimentarla a gusto y retirarla.
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